El libro en cuestión es una primera edición española y hace poco me dio por leérmelo . Devoré sus doscientas sesenta páginas en tres golpes .
Trata sobre las peripecias de unos soldados del bando alemán en el frente ruso de la segunda guerra mundial . Lo cierto es que me gustó mucho y me divertí leyéndolo . Es literatura fácil que entretiene . Narra con gran crudeza y exageración los avatares de la guerra . En ciertos momentos llega a ser delirante , rozando lo gore .
Si te gustan las novelas y pelis de guerra , o eres fan de todo lo concerniente a la segunda guerra mundial te recomiendo sin dudarlo los libros de S.Hassel .
Si crees que son una alegoría del nazismo , estás completamente equivocado , sino todo lo contrario .
Sven Hassel, que murió en 2012 a los 95 años, residía en Barcelona desde 1964 , vendió más de cincuenta millones de ejemplares de sus libros, traducidos a una veintena de idiomas, y supo llevarse las dudas sobre su pasado a la tumba, con lo que acrecentó su aura de misterio . Sostenía que, nacido en un pequeño pueblo danés en 1917, había ingresado a los 17 años en un regimiento de húsares de su país y luego, en 1938, se había apuntado voluntario para a continuación luchar en el ejército alemán durante la segunda guerra mundial, sirviendo en prácticamente todos los frentes (escenario de sus historias), excepto en el norte de África. Sus novelas, entonces, serían un testimonio personal de la guerra a través de las tremendas vivencias de ese puñado de personajes, en uno de los cuales —llamado también Sven—, se representa a sí mismo.
Con los años surgieron voces que cuestionaban esa biografía oficial y que incluso apuntaban que Hassel no solo no vivió las experiencias de sus relatos, que se las habrían sido contadas tras la guerra por veteranos daneses de las SS, sino que fue en realidad un nazi danés que permaneció en su país. En todo caso, los especialistas en temas militares han detectado errores en sus novelas y situaciones del todo imposibles, como que los alemanes pusieran en manos de soldados de un batallón disciplinario los punteros carros Tiger y Panther.
Sus partidarios le defienden recordando que sus novelas —una de las cuales, Los pánzers de la muerte, fue llevada al cine— son eso, novelas, y que si bien la médula de las historias que narra es bien real, Hassel las trasladó conscientemente al terreno de la ficción. Sea como sea, lo innegable es que si bien sus 14 títulos muestran la contienda desde el bando alemán y llevan a solidarizarse con las penurias de los soldados germanos, el punto de vista es profundamente antinazi y lo que se deriva de las novelas, pese a todas sus aventuras, que son muchas, es un profundo horror, por no decir asco, por las miserias de la guerra. Mucho antes de la actual moda de contarlo y mostrarlo todo de manera descarnada, Hassel ya lo hacía en los años sesenta y setenta , no ahorraba ejecuciones sumarias, torturas, violaciones, muertes horrorosas descritas pormenorizadamente y cien mil otras barbaridades. Desde luego no es la prosa de alguien que glorifique la guerra y el espíritu marcial. La mayoría de sus protagonistas reflejan sentimientos antimilitaristas y antinazis, empezando por el nihilista Porta, un antihéroe que le gusta romper la rígida uniformidad prusiana luciendo un sombrero de copa amarillo.
Si me preguntáis mi opinión , diría que no creo que participara en la guerra , pero eso sí la describió muy bien . En cierto modo pienso que es como Patrick O’Brian que siendo de la campiña irlandesa y no haber pisado el mar , escribió las mejores novelas sobre la armada inglesa hasta la fecha .
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